Análisis: Deebot Slim de Ecovacs, el robot que limpia tu casa

Una de las cosas que menos me gustan de este mundo es tener que limpiar la casa. Es cansado, aburrido y a las pocas horas todo vuelve a estar lleno de polvo (y de pelos de gato)… así que, ¿por qué no dejar que se encargue una máquina de ello, mientras yo me dedico a cosas más productivas? Por eso, cuando me propusieron probar el Deebot Slim de Ecovacs durante unos días, no me lo pensé dos veces. ¿Un robot que limpia? ¡Lo quiero, y lo quiero ya!

Análisis: Deebot Slim de Ecovacs

 

Primeras impresiones

El Deebot Slim de Ecovacs es similar a otros robots limpiadores que puedes haber visto en tiendas y centros comerciales. Esencialmente, es un pequeño aparato aspirador dotado de ruedas que se desliza por tu casa, aspirando polvo, migas, pelos y suciedad general del suelo. Pero en el caso del Deebot Slim, tiene algunas características especiales que vale la pena destacar.

Para empezar, su altura. El Deebot no se llama «slim» por casualidad; con menos de 6 centímetros de alto, es capaz de meterse bajo aquellos muebles donde otros robots parecidos no llegan – y así evitarte el trabajo de tener que moverlos para que el robot llegue a los rincones, o para limpiarlos tú.

Análisis: Deebot Slim de Ecovacs

También me gustó especialmente el diseño, más alegre y colorido que el de otros dispositivos similares, y además muy fácil de montar. Una vez lo sacas de la caja, sólo tienes que encajar los cepillos en forma de hélice en unos huecos señalados mediante un código de colores, y ya lo tienes listo para funcionar. Lo único que eché de menos es un asa para poder cogerlo más cómodamente cuando quieres transportarlo de un lado a otro.

Análisis: Deebot Slim de Ecovacs

 

¡A limpiar se ha dicho!

Antes de usar el Deebot Slim, recomiendan una carga previa de al menos 12 horas. Después de eso, puedes ponerlo en marcha apretando el botón situado en la parte superior del robot, o haciendo uso de su mando a distancia.

Análisis: Deebot Slim de Ecovacs

El robot cuenta con varios modos de limpieza, entre ellos uno pensado especialmente para recorrer las paredes y esquinas de la habitación, y otro capaz de centrarse sobre todo en un área determinada donde haya una acumulación de suciedad extra.

El Deebot Slim es capaz de detectar obstáculos, tales como paredes y muebles; o bien les da un suave toque para acto seguido cambiar de dirección, o bien evita chocarse totalmente con ellos reduciendo su velocidad y moviéndose en paralelo al obstáculo.

Este modelo, además, cuenta con un accesorio extra: una mopa opcional que termina de limpiar cualquier resto que pueda quedar después de que los cepillos hayan barrido la suciedad, moviéndola a la boca del aspirador.

Análisis: Deebot Slim de Ecovacs

De vez en cuando, lógicamente, hay que vaciar el depósito de suciedad. Tanto su extracción como su vaciado son muy sencillos, y en menos de un minuto lo tienes listo. Sobre si se llena muy rápido, todo depende del nivel de suciedad de tu casa, pero en general aconsejaría vaciarlo después de cada sesión de limpieza.

Análisis: Deebot Slim de Ecovacs

En mis pruebas el Deebot Slim ha estado limpiando toda la casa durante más de dos horas antes de quedarse sin batería. Pero incluso llegado ese momento tampoco tienes que preocuparte, porque el propio robot va él solito hasta su base a cargarse.

Análisis: Deebot Slim de Ecovacs

Por otro lado, el nivel de ruido es bastante aceptable. Es una aspiradora, claro, pero bastante más silenciosa que otras aspiradoras estándar.

 

Los rincones son cosa tuya

El Deebot Slim es de gran ayuda a la hora de mantener limpia tu casa, sin tener que dedicar ni minuto a ello. De hecho, incluso lo puedes programar para que limpie sin necesidad de que tú estés ahí. Aunque, todo sea dicho, la forma e hacerlo es un poco rara; no puedes elegir la hora, sino que se programa automáticamente a la misma hora a la que activas dicha función. Es decir, si quieres limpiar todos los días a las 6 de la tarde, tendrás que activar la función de programación un día a esa hora.

No obstante, lógicamente no es perfecto. En primer lugar, conviene despejar un poco la habitación de muebles y otros elementos. No es necesario moverlo todo de sitio (y menos con el Deebot Slim, que cabe casi en cualquier parte), pero sí conviene dejarle el camino lo más abierto posible, porque así limpiará más. Cuanta más cosas haya por medio, más vueltas dará y más batería gastará.

Análisis: Deebot Slim de Ecovacs

Y con todo, siempre quedará algo que te tocará a ti: rincones donde el Deebot Slim no llega, y en los que habrá que hacer un repaso de vez en cuando. Y por supuesto el resto de tareas: polvo, fregar, ventanas…

Otra cosa a tener en cuenta es que el Deebot Slim no puede pasar por encima de alfombras. En mi caso no es problema, es más, ha pasado sin quejas por encima de esterillas de deporte. Pero quizás si se trata de alfombras gruesas no lo lleve tan bien.

 

Conclusiones

Como decía justo antes, el Deebot Slim de Ecovacs es una gran ayuda para mantener la casa limpia sin esfuerzo, pero no es un sustituto 100% de un limpiador humano. Así que ya sea cogiendo tú mismo la fregona o contratando a alguien para que lo haga por ti, alguien tendrá que encargarse de limpiar todos esos rincones a donde el Deebot Slim (y otros robots similares) no llegan.

Análisis: Deebot Slim de Ecovacs

Aun así, en general me ha parecido un invento fantástico, que funciona muy bien y que me ha permitido poder seguir escribiendo, jugando con videojuegos o viendo una serie mientras el robot se encargaba de la limpieza. Uno de esos gadgets que da pena devolver cuando llega el momento…

 

2 comentarios acerca de “Análisis: Deebot Slim de Ecovacs, el robot que limpia tu casa

  1. Si se avería no hay manera de enviar para su reparación, compre un MD85 en diciembre actualmente averiado, intento ponerme en contacto con atención al cliente y no atienden email ni el teléfono 902. NO COMPRAR

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