Análisis: Nexus 4

Primer contacto

Lo primero en lo que te fijas de un dispositivo es su aspecto exterior, es inevitable. El Nexus 4 es bastante grande (su pantalla mide 4,7») pero aun así es cómodo de manejar con una sola mano.

Por un lado, el teléfono es bastante ligero (me sorprendió por su peso igual que lo hizo en su día el iPhone 5); por otro, tiene un borde de goma alrededor de la carcasa que mejora mucho el agarre.

Gracias a este detalle puedes usar el teléfono sin tener la constante sensación de que se te va a resbalar entre los dedos. Es cierto que su acabado en líneas generales puede no ser tan elegante como el de otros móviles, pero no es tampoco un terminal de aspecto barato.

Tanto la parte frontal como trasera del Nexus están fabricadas de cristal, cosa que mucha gente ha criticado por su fragilidad; pero, qué queréis que os diga: prefiero ese cristal al plástico que usan otros fabricantes, y si se tiene un poco de cuidado, el teléfono se mantiene impecable. Además, el diseño de la parte trasera es muy original, y cambia los colores según donde le toca la luz.

Además de las conexiones para batería y auriculares, el Nexus 4 tiene dos únicos botones «físicos»: el del volumen y el de encendido/apagado. Éste último a veces hace un ruidito como de estar medio suelto, pero nada preocupante.

Puesta en marcha

Poner en marcha y configurar un Android por primera vez es pan comido, y el Nexus 4 no se queda atrás. Lo enciendes, introduces tu cuenta de Gmail y ya lo tienes. Tu correo y calendario se configuran solos, tus contactos se importan desde Google y, si has usado otro Android antes, las apps que compraste en su día las tienes en Google Play listas para bajar de nuevo. 

Una vez lo tienes más o menos configurado a tu gusto, el Nexus 4 se presenta en todo su esplendor. Lo curioso es a pesar de tener la pantalla más grande, sólo caben cuatro filas  por cuatro columnas de iconos, ya que la barra superior de Google no se puede eliminar (o al menos yo no he sabido cómo…)

Desde los primeros minutos de uso, quedé sorprendida muy positivamente por la respuesta de Android 4.2.1 Jelly Bean, el sistema operativo que lleva este Nexus. Es suave, rápido, no va a saltos ni tampoco tiene esos pequeños «retrasos» de otros terminales Android que había probado hasta ahora. Es sin duda la mejor versión de Android que he probado, y la única que no me ha hecho pensar que la respuesta de pantalla del iPhone era infinitamente mejor. Creo que con Jelly Bean, Android se está poniendo a la altura de iOS en muchos aspectos.

Precisamente uno de los puntos donde Android siempre ha destacado por encima de iOS son las notificaciones de sistema, y el Nexus 4 no es ninguna excepción. Gracias a su sistema de avisos mediante frases e iconos en la barra superior del terminal (que luego puedes desplegar cuando necesitas más datos) puedes estar al tanto de todo cuanto sucede (nuevo correo, menciones en Twitter, mensaje en Facebook, nuevos Whatsapps, actualizaciones de apps, descargas y muchos más) sin perder el foco en lo que estés haciendo con tu móvil.

Además de esos avisos, el Nexus 4 cuenta con un pequeño LED que se ilumina para indicarte que tienes un mensaje, email, llamada perdida o lo que sea. Y si te instalas una app como Light Flow podrás configurar hasta el más mínimo detalle esos avisos mediante LED. Por ejemplo: una luz azul para los correos, verde para los DM de Twitter, amarilla para las llamadas perdidas, roja para los avisos de batería baja, etc.

Las apps de Android

Ya que empezamos a hablar de apps, hay que mencionar Google Play, la tienda de Android donde puedes comprar no sólo apps y juegos, sino también películas, música y libros. Lejos de la imagen de Android de hace unos años, con poca variedad y calidad de apps, Google Play se ha puesto las pilas y nos ofrece un catálogo bastante extenso y variado.

Estoy segura de que echarás en falta alguna app (yo misma me acordé mucho de Tweetbot, aunque encontré excelentes alternativas como Falcon Pro o Tweetings) pero todas tus necesidades básicas están más que cubiertas: clientes de redes sociales, editores de fotos, apps para leer ebooks… sin mencionar los widgets o las que ya vienen integradas con el sistema operativo.

Los widgets son una de las cosas que más me gustan de Android. Te permiten acceder rápidamente a opciones del sistema o a información básica de tus apps favoritas, como los últimos emails o tuits que has recibido. Uno de los más útiles que he probado estos días es el de Pepephone, que te permite hacer seguimiento de tu consumo de teléfono y datos – sin olvidar el de Control de energía, que te permite activar y desactivar varias opciones del sistema (WiFi, bluetooth, localicación y más) para ahorrar batería.

Otra forma de acceder rápidamente a esos ajustes de sistema de uso frecuente (activación de WiFi o 3G, modo avión, bluetooth…) es mediante tu perfil en las notificaciones, que puedes abrir con sólo deslizar dos dedos desde la parte superior de la pantalla del Nexus.

Un sistema operativo que lo integra casi todo

Una de las cosas más interesantes de Android (y a la vez una de sus grandes diferencias con iOS) es la integración de muchas apps con el propio sistema operativo. No me refiero sólo a los widgets de las apps que tengas instaladas (cliente de Twitter, Instagram, Gmail y demás) sino también a su integración en los menús. Un ejemplo: si hago una foto y luego decido que quiero compartirla en Whatsapp, no tengo que abrir Whatsapp y desde allí volver de nuevo a la galería de fotos para seleccionarla (como en iOS) sino que desde la propia galería de fotos abro el menú de «Compartir» y allí está la opción de Whatsapp – junto con muchas otras apps. 

Otro ejemplo de integración es que en el Nexus 4 ya tienes un montón de filtros, marcos y efectos de imagen con los que adornar tus fotos, de forma que si no eres muy «exigente» en este sentido, ni siquiera necesitas descargar un editor de fotos.

Algo que también me ha gustado es que esta versión de Android integra en su teclado un sistema de escritura similar al de Swype, que te permite formar las palabras moviendo el dedo de una letra a otra. Es bastante cómodo, aunque al principio cuesta acostumbrarse. En general, y esto quizás sea sólo una manía personal, el teclado de Android no acaba de gustarme (tampoco el del Nexus 4). Me parece más incómodo que el de iOS y me equivoco mucho más con él. También tengo que decir en su favor que el corrector de Android es muy bueno y ayuda un montón a escribir más rápido – aunque no esté para todos los idiomas.

Ahora bien, la funcionalidad integrada en el Nexus 4 que más me ha llamado la atención es Google Now, un sistema con el que Google intenta proporcionarte la información que necesitas antes incluso de buscarla.

Durante los días que lo he probado Google Now me ha informado del estado del tráfico antes de salir para el trabajo o volver a casa, avisado de cumpleaños de amigos, mostrado la previsión del tiempo, buscado paradas de metro y autobús cerca de mi localización, avisado de citas pendientes, buscado fotos geolocalizadas cerca de mí, y mucho más. Es una funcionalidad con mucho potencial, aunque exija tener siempre la localización activada – con la consiguiente carga extra para la batería.

Para terminar, un par de anécdotas de mis pruebas del Nexus 4. Por un lado, me extrañó no encontrar una app para tomar notas sencillas entre las que incluye el teléfono de fábrica; uso bastante la del iPhone, así que tuve que descargar una (InkPad). Por otro lado, y aunque parezca una tontería, que el icono del calendario muestre el día actual (como sucede en iOS) es bastante útil; de vez en cuando miraba el icono del calendario del Nexus y siempre pensaba que era día 31.

Necesita mejorar…

Igual que en nuestras notas de pequeños nos ponían «progresa adecuadamente» o «necesita mejorar», Android ha progrado muy bien en todos los aspectos con el Nexus 4, pero le siguen quedando cosas por mejorar.

La primera de ellas, en mi opinión, es la cámara. No es una mala cámara para móvil (8 MP, grabación de vídeo en 1080p), pero la calidad de imagen de la cámara del iPhone me sigue pareciendo mejor – y esto es, repito, una impresión personal.

La segunda es que no hay un «centro de notificaciones» donde gestionar los avisos de todas tus aplicaciones, sino que tienes que ir una por una configurándolas por separado – y además las opciones cambian mucho de una a otra. Si estás acostumbrado al centro de notificaciones de iOS, se hace bastante lioso.

Por último, una cosa que me llamó la atención durante toda esta semana de prueba es que la batería tarda mucho en cargar, bastante más que el iPhone (cuando su duración es muy similar). 

Conclusión

El Nexus 4 me ha sorprendido muy gratamente. Había oído cosas buenas de él, pero quería verlo con mis propios ojos; ahora puedo entender el porqué de todos esos comentarios positivos.

Es la primera versión de Android que no me hace echar de menos iOS en una hora. La primera que responde rápidamente en pantalla, que no tarda medio segundo en responder a toques y gestos, que no hace scroll a saltos.

Me han gustado mucho cosas como los widgets, las notificaciones y algunas de las funcionalidades incluidas en el sistema como los filtros de imagen y Google Now. O lo inmensamente fácil que es pasar datos (imágenes, tonos de llamada, fondos de pantalla, canciones…) del móvil al PC y viceversa: en Windows basta con enchufarlo y aparecerá como una unidad USB, y en Mac instalas una aplicación sencillísima llamada Android File Transfer y listo.

Todo esto sin olvidar que el Nexus vale sólo 299 € en su versión de 8 GB y 349 € en su versión de 16 GB. Y aquí es donde verdaderamente viene el problema: con estas características y este precio, el Nexus 4 se agotó en menos de una hora el día de su lanzamiento, y desde entonces son muchos los que esperan que Google y LG repongan stock – sin aparente movimiento por ninguna de las dos compañías.

Es más, los rumores apuntan a que LG dejará de fabricar el Nexus 4 porque quiere centrarse en otros dispositivos de cara al Mobile World Congress que se celebrará en Barcelona el mes que viene. Sea como sea, es una pena que un móvil tan atractivo por muchas razones sea imposible de conseguir apenas dos meses después de su lanzamiento – y que no haya buenas perspectivas sobre poder hacerlo en un futuro próximo. Google y LG, simplemente, nos ha quitado el caramelo de la boca.