El pasado viernes, como muy bien nos recordaba Toni, tuvo lugar el Día del Orgullo Friki. Personalmente los «días de» me parecen una tontería, pero creo que en este caso el Día del Orgullo Friki se celebra ya asumiendo de antemano que se trata de una fiesta chorra. Y como ya desde el principio no nos lo tomamos en serio, tiene su gracia.
Lo malo de este día es que para empezar, la gente no tiene muy claro qué es un friki. Yo he oído tildar de «friki» lo mismo a un programador informático loco por los ordenadores que a Leonardo Dantés y su pandilla de amigos, y la verdad, no son lo mismo. Además, la gente suele usar esa palabra de forma despectiva, quizás precisamente por esa razón: porque desconocen de qué están hablando.
Los medios de comunicación tampoco contribuyen a aclarar las cosas. En general, cuando tratan de temas relacionados con ordenadores, Internet o videojuegos lo hacen usando topicazos y se les nota a la legua que no tienen mucha idea. No hay más que ver los reportajes sobre el poder maligno de los videojuegos con los que nos obsequian de vez en cuando (último ejemplo, éste que habla de WoW y Everquest de una cadena de televisión norteamericana).
En resumen, ser friki no es algo negativo. Es simplemente ser un apasionado de algo. Y tener pasión no puede ser malo en absoluto 🙂 Yo soy friki y estoy orgullosa de serlo! ¿Y tú?
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