Siempre he pensado que la mejor forma de que un niño aprenda algo nuevo es haciendo algo que le guste y le divierta. El juego es un poderoso instrumento de enseñanza, y a través de él se pueden aprender muchas cosas… incluso robótica y programación.
Ése es precisamente el objetivo de los creadores de Kamigami, unos curiosos robots inspirados en insectos que los niños pueden construir, programar y controlar ellos mismos. De esta forma, no sólo se divierten sino que además pueden aprender los conceptos básicos de programación, robótica, ingeniería y biología.
Los Kamigami se construyen en menos de una hora (según sus diseñadores), ensamblando piezas sin necesidad de ningún tipo de herramienta. Hay tres robots para elegir (Musubi, Inari y Goki) cada uno con una apariencia diferente. Están dotados de una serie de sensores para comunicarse con el mundo – y también con otros robots.
Una vez construidos, se pueden programar mediante una app con sólo arrastrar y soltar elementos, y gracias a su conexión Bluetooth se pueden controlar fácilmente con el móvil.
En el momento de escribir este artículo, los pequeños robots Kamigami son un proyecto de Kickstarter en busca de financiación. En ese momento, puedes hacerte con uno con sólo aportar 49 dólares al proyecto, y los robots se enviarán durante el primer trimestre de 2016.
Hay que tener en cuenta, eso sí, que en principio sólo enviarán robots a Estados Unidos y Canadá, debido a las certificaciones que se piden para enviar a otros países – aunque, según dicen sus creadores, esto cambiará en el futuro.