Seamos sinceros: por mucho que nos digan aquello de que en vacaciones hay que desconectar, la mayoría de nosotros no se separa del móvil en esos días. Aunque sea para hacer fotos y publicarlas en Internet para dar envidia a los amigos.
Lo malo de eso es que, con tanta excursión a la playa o a la piscina, se multiplican las posibilidades de que tu móvil sufra algún percance: caídas en la arena, chapuzones en el agua y demás pueden poner en peligro tu dispositivo.
En mi artículo de esta semana en Consumer Tecnología te explico cómo reaccionar en caso de que el móvil se llene de arena, o se caiga al agua – además de algunos consejos para evitarlo.
Lee el artículo completo aquí.
¿Alguna vez te ha pasado algo así? ¿Pudiste solucionarlo?